22 mar 2006

DEPECHE MODE MADRID









Powered by CastpostEl lunes 6 de febrero tuvo lugar el primero de los conciertos ofrecidos por “Depeche Mode” en la capital. El lugar, el Palacio de los Deportes de Madrid, que con una ocupación posible de 18.000 personas hubo quien se quedó sin entrada. Este hecho, junto con las riadas de gente agolpada en los distintos accesos, sugiere la reflexión de que no sólo conservan a los seguidores de siempre, sino que a pesar del tiempo, esta banda recoge la devoción de almas nuevas. La entrada del público al recinto fue constante desde la apertura de puertas, siendo las 21:00 horas el momento en que la ocupación prácticamente llegó a su máxima. El grupo telonero escogido para la gira europea ha sido “The Bravery” encargado así de abrir noche a eso de las 20:35, para calentar motores con su power-pop tintado con tonos eléctricos. Con su composición de batería, bajo, teclados y guitarras, ofrecieron oportunidades de baile al público, que en principio se mostraba reticente, pero después agradecido y animado por la dosis de movimiento, aceptó de buena gana la proposición. Aquella noche, venían más que presentando, reafirmando la presencia de su disco homónimo, con el que llevan casi un año de rodaje en el mercado. Con actitud vitalista tocaron temas como “Unconditional”, “Out of line” y “Honest mistake” con los que pudimos disfrutar de una voz envolvente y unos ritmos optimistas, que nos conducían al sentimiento de esperanza que apunta a nuestro poder de cambiar las cosas. A las 21:00 horas, Tjeerd (cantante y guitarrista), Sven (bajista), Joppe (batería) y sus acompañantes, abandonaron el escenario despidiéndose al estilo punk, tirando baquetas y micrófono al suelo y saliendo casi sin volverse. La música de sala, oscura y electrónica, animaba a los asistentes a un baile inusitado en un intermedio de concierto, creando lazos entre los desconocidos que por casualidad se habían colocado juntos. No se puede morir sin estar inmerso en tal escena. Eran las 21:30 cuando “Depeche Mode” salió a un escenario futurista en el que unas repisas de nave espacial servían para sujetar los teclados y una gran bola metálica, reflectaba mensajes lumínicos, que apoyaban el espectáculo; sex, love, angel… Con el tema "A pain that I'm used to" y su alarmante comienzo, los componentes de la banda ocuparon sus sitios y sin rodeos David Gahan le puso voz. Venían presentando su último trabajo “Playing the Angel”, aunque su actuación fue un repaso de toda su discografía, para la complacencia del público. Martin Gore, ataviado con una cresta negra y unas hombreras de plumas, se hizo cómplice de la ceremonia ante sus fieles y arengaba junto con David al público para que siguieran el ritmo maduro de sus canciones. Escuchamos temas nuevos como “John the Revelador” y “Precius” y sentimos escalofríos con el sonido de “I Feel You”, "Enjoy the silence" y "Home", canción interpretada en solitario por Martin Gore. “Personal Jesús” fue una prueba de resistencia para el Palacio de los Deportes, pues hizo temblar sus cimientos, envolviendo y apretando las gargantas que coreaban las letras, dirigidas por David que no paraba de animar a cantar. Eran las 10:55 cuando ya sabíamos que iban a ofrecer el bis. "Shake the disease" interpretada por Martin acompañado por Andrew Fletcher a lo teclados, fue elegida para este fin junto con "Everything Counts" y una eléctrica "Just can't get enough". "Goodnight lovers" sirvió para desearnos buenas noches con letras compartidas en el espectáculo interactivo en el que participamos. Canciones tatuadas en nuestro recuerdo, con sonido reflexivo, sentimental y poderoso, haciendo que el público disfrutara de lo lindo llegado el ansiado día 6, día en que no todos consiguieron obtener la extremaunción para bailar en el paraíso con Depeche Mode.